• Diseño y planificación de Estrategia Educativa: Diseñar y desarrollar la estrategia educativa del Programa (objetivo general, objetivos específicos, destinatarios principales, destinatarios secundarios, cronograma de actividades desarrolladas, descripción de materiales a utilizar y su costo, bases para su implementación, evaluación, convocatoria de equipo de trabajo y perfil (tutores/as).
• Diseño y Producción de los Kits: Diseñar y producir los 4 kits planteados para el Programa (Bio-compostera,Tratamiento de residuos sólidos urbanos, Huerta urbana y Módulo de producción de huevos), con sus respectivas herramientas, insumos, guías educativas y planificación de actividades recreativas.
• Gestión operativa/implementación: Implementar el Programa en el Espacio Cultural y Social La Quadra. Esto implica el inicio de todas las actividades diseñadas previamente, la coordinación general y trabajo operativo del equipo del Programa. A su vez, se realizarán las capacitaciones a tutores/as en estrategias de educación ambiental, estrategias de actividades ambientales lúdico recreativas e implementación de los kits, junto con encuentros de tutoría y consultorías. Se espera alcanzar a 400 niñas/niños por año y 30 tutores/as por espacio.
• Control y seguimiento del programa: Diseñar y desarrollar una herramienta digital que permita medir el impacto y brindar información para la toma de decisiones. Mediante esta herramienta de gestión de datos, será posible realizar un seguimiento y análisis de las instancias del Programa mediante la carga de datos realizada por los/as tutores/as.

Resultados esperados:

• 400 Niñas y niños aprenden a producir sus propios alimentos, accediendo a herramientas teóricas/prácticas y ejerciendo la práctica in situ de manera recreativa.
• Se logra redefinir el concepto de educación alimentaria, la conexión de las niñas y niños con la naturaleza y se adoptan buenos hábitos alimenticios, mejorando su calidad de vida debido a que logran un mayor acceso al conocimiento y mejoras en su salud.
• Se adaptan espacios para que favorezcan la práctica (1 espacio para etapa de implementación).
• La comunidad es parte del proyecto, se siente comprometida e involucrada, los espacios se cuidan como propios por la comunidad.
• Se logra un cambio de hábitos en la sociedad, algo potencialmente replicable y escalable.

Resultados Directos:

• Diseño y producción de 4 modelos de kits lúdicos de bajo costo. Cada uno con los insumos y materiales para su construcción. Un total de producción de 40 kits.
• 30 capacitaciones para las/os tutoras/es del Programa y guías educativas (respectivas para cada kit).
• 40 guías educativas para niñas/niños (1 por kit).
• Diseño y desarrollo de una herramienta digital y metodología de seguimiento y evaluación de impacto del programa (datos).
• Adaptación del espacio seleccionado para la práctica para lograr el desarrollo de las actividades.
• 15 consultorías profesionales para los/as tutores/as y coordinadores/as del proyecto.

Resultados Indirectos:

• 400 Niñas y niños se educan alimentariamente, cambian sus hábitos alimentarios, aprenden a producir alimentos frescos, sin agrotóxicos y super nutritivos, bajo un modelo circular y de triple impacto.
• Las familias de las niñas/niños se involucran en el cambio, ya que los niños son grandes motivadores del mismo. Además, motivando a más familias de la comunidad.
• Se tratan los desechos orgánicos, disminuyendo gases de efecto invernadero y reduciendo la cantidad de residuos para enterramiento.
• Se fomenta la separación de residuos sólidos y su clasificación.
• Mejoran los índices de salud (físicos y cognitivos) en niñas, niños y sus familias.
• Se desarrolla un modelo estadístico de gestión de datos para la toma de decisiones.
• Los proveedores contribuyen con otro tipo de alimentos que complementan la dieta de las niñas y niños.
• Niñas y niños forman parte de una revolución de impacto mundial.
• Disminuimos la brecha social.
• Contribuimos a la soberanía y seguridad alimentaria.

Impacto esperado:

Los actores especializados que son parte de la red de cambio, tendrán la responsabilidad de medir el impacto de la solución según su área de especialización, según las 5 aristas que sostienen la estructura del programa: Educativa - Salud - Social - Técnica - Ambiental.

Se implementará un Cuadro de Mando Integral (colaborativo y online) en donde se definan por cada perspectiva (Impacto Social, Recursos Financieros, Niños y niñas de zonas vulnerables, Procesos, Aprendizaje e innovación) dimensiones del modelo, sus objetivos e indicadores de resultado: i) Porcentaje de niños y niñas que mejoran su percepción respecto al consumo de vegetales al finalizar el programa, ii) Porcentaje de niños y niñas del programa que aumentan su consumo de vegetales, iii) Cantidad de acuerdos realizados con aliados estratégicos, iv) Cantidad de soluciones implementadas, v) Cantidad de alimento producido (frutas, verduras y huevos), vi) Cantidad de tutores/as inscriptos en el programa, vii) Cantidad de niños y niñas inscriptos en el programa, viii) Cantidad de residuos orgánicos compostados y, ix) Cantidad de residuos sólidos urbanos recolectados y clasificados.

• Asociación Civil Con-tenedor.
• CESNI - Centro de Estudios sobre Nutrición Infantil.
  
• Colegio de Nutricionistas de Córdoba.
• COYS - Centro de Obras y Servicios de Córdoba.
• Espacio Cultural y Social La Quadra.
• Facultad de Nutrición - Universidad Católica de Córdoba.
• Fundación Alimendar.
• Fundación AVINA.
• INTA Córdoba- Instituto Nacional de Tecnología. Agropecuaria.
• Valeria Churba.

• Alejandra Torres, Secretaria de Planeamiento, Modernización y Relaciones Internacionales, atorres@idesa.org (Córdoba, Argentina)
• Luciano Crisafulli, Director de Innovación Municipalidad de Córdoba (Argentina), lucianocrisafulli@gmail.com
• Ramiro Argañaraz, Coordinador Ludik y Asesor de Innovación Municipalidad de Córdoba (Argentina), rami.arganaraz@gmail.com / somosludik@gmail.com
• Juan Pablo Las Heras, Emprendedor de Poniio, jplasheras@gmail.com - Argentina.

La inseguridad alimentaria es una problemática que afecta a un gran porcentaje de niños y niñas de zonas vulnerables de la Ciudad de Córdoba, generando problemas nutricionales y poniendo en riesgo la salud y calidad de vida de las futuras generaciones. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), “Una persona padece inseguridad alimentaria cuando carece de acceso regular a suficientes alimentos inocuos y nutritivos para un crecimiento y desarrollo normales y para llevar una vida activa y saludable.”

En el último informe de pobreza publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censo de Argentina (INDEC), del primer semestre del 2021, en el Gran Córdoba la tasa de pobreza fue del 46,6% y para los chicos menores de 15 años del 54,3%. A su vez, la tasa de indigencia fue del 10,7% y para niñas/os indigentes del 16,6%.

Un estudio actualizado de geolocalización de comedores y merenderos realizado por la Municipalidad de Córdoba reveló que en la ciudad hay 982 puntos identificados a los que asisten, una o más veces por semana, niños y adolescentes para retirar sus viandas. Aunque se estimó que la aparición de las ollas populares, organizadas por los mismos vecinos, podría elevar este número a 1.500.

Según estudios e información obtenida desde nuestra red de expertos, conformada por organizaciones dedicadas al estudio de nutrición infantil, el consumo de frutas y verduras en niñas y niños es muy bajo, principalmente en hogares de menores ingresos. Información de relevamientos realizados por organizaciones locales refleja que la mayoría de los niños consumen en promedio la mitad de lo recomendado por la OMS y FAO (400 gramos diarios). Por otro lado, según relevamientos directos con actores que pertenecen al territorio y viven la problemática día a día, en los comedores barriales el consumo de frutas y verduras es de alrededor de 40 gramos por día. Esto significa que las niñas y niños que asisten hoy en día a estos espacios consumen en promedio sólo el 10% de frutas y verduras de lo recomendado por la OMS.